Desarrollo del indicador del componente de conflicto entre humanos y vida silvestre para la Meta 4 del Marco Mundial de Diversidad Biológica Kunming-Montreal
Antecedentes
El conflicto entre humanos y vida silvestre (HWC, por sus siglas en inglés) es una preocupación creciente y grave para la conservación de especies, los medios de vida sostenibles y el desarrollo a nivel mundial. En diciembre de 2022, las Partes del Convenio sobre la Diversidad Biológica adoptaron el nuevo Marco Global de Biodiversidad de Kunming-Montreal (CBD/COP/15/L.25), siendo esta la primera vez que una política internacional importante incluye el HWC:
Meta 4: “Asegurar acciones urgentes de gestión para detener la extinción inducida por el ser humano de especies amenazadas conocidas..., y gestionar eficazmente las interacciones entre humanos y vida silvestre para minimizar los conflictos entre humanos y vida silvestre a favor de la coexistencia.’’
Para monitorear el progreso hacia las metas, las Partes también adoptaron el Borrador del Marco de Monitoreo para el Marco Global de Biodiversidad (MGB), que incluye un conjunto de indicadores para cada meta (CBD/COP/DEC/15/5). El indicador para el HWC está incluido como un indicador componente, con el siguiente enunciado:
​
Tendencias en la gestión efectiva y sostenible del conflicto y la coexistencia entre humanos y vida silvestre.
​
Previo a la COP15, publicamos una serie de documentos con recomendaciones sobre la inclusión del HWC en el MGB y convocamos discusiones sobre el desarrollo posterior del indicador correspondiente. En junio de 2022 se celebró el primer taller técnico, con la participación de miembros del HWCCSG, la FAO, WWF, la Secretaría del CDB, el OEWG, UNEP-WCMC y varias Partes. Un resumen de las discusiones puede encontrarse aquí.
Como institución encargada de coordinar el desarrollo del marco para el HWC, propusimos una nota conceptual y hemos coordinado esfuerzos durante los últimos 10 meses para asegurar el progreso hacia el desarrollo de un indicador para esta parte de la Meta 4.
​
Concepto del indicador
Dado que la Meta 4 se refiere tanto al conflicto como a la coexistencia, las primeras discusiones abordaron la viabilidad del alcance del indicador. Monitorear la coexistencia es, en muchos sentidos, mucho más difícil de delimitar, ya que los humanos coexisten con la vida silvestre todo el tiempo —por ejemplo, al pasar en coche junto a un ciervo en un campo o al observar un ave en un jardín— por lo que registrar la ausencia de un incidente o encuentro carecería de significado. Aunque el enfoque en la coexistencia es popular entre científicos de la conservación, ya que transmite una visión más positiva del problema, para fines de medición del cambio y el progreso, al dar seguimiento a los impactos de vivir con la vida silvestre, el indicador se centrará en el conflicto.
Además, el conflicto entre humanos y vida silvestre es un problema complejo que está intrínsecamente determinado por contextos sociales, culturales y políticos, que a su vez determinan en qué medida es posible la coexistencia. La UICN define el conflicto HWC como las disputas que surgen cuando la presencia o comportamiento de la vida silvestre representa una amenaza directa, recurrente, real o percibida a los intereses o necesidades humanas, provocando desacuerdos entre grupos de personas e impactos negativos en las personas y/o la fauna (Declaración de Posición de la UICN sobre HWC, 2020). Los especialistas coinciden en que monitorear únicamente las interacciones o impactos (como pérdidas, muertes, represalias a la fauna, daño a medios de vida, etc.) sería insuficiente para captar la esencia del problema y los factores desencadenantes del conflicto.
​
Por ello, es esencial que cualquier indicador sobre HWC capture no solo los impactos cuantificables, sino también los contextos socio-políticos cualitativos que determinan si un país está avanzando o no hacia la coexistencia. En el desarrollo de un enfoque de monitoreo para el HWC, se deben considerar los siguientes aspectos clave (también discutidos en el Documento informativo de 2022 sobre el desarrollo de indicadores para una meta sobre HWC):
​
-
El indicador debe centrarse en el objetivo a largo plazo de abordar los factores impulsores del conflicto, y no solo en los síntomas.​
-
El desarrollo de métodos de monitoreo debe ser un proceso altamente participativo y co-diseñado, involucrando a múltiples actores para asegurar su relevancia y aplicabilidad.
-
Los aspectos humanos, sociales e intangibles del HWC son los componentes más importantes a medir, pues reflejan mejor la raíz del problema​
-
Las situaciones de HWC y las capacidades de gestión son relativas y variables, por lo que los informes deben ser factibles y adecuados para cada parte, considerando los recursos necesarios para recopilar y analizar los datos.
Con esto en mente, y con el objetivo de medir las Tendencias en la gestión efectiva y sostenible del conflicto y la coexistencia entre humanos y vida silvestre y captar su complejidad, el HWCCSG recomendó que un método preciso y significativo para medir el HWC debe incluir tres elementos esenciales:
​
-
Incidencias de impactos negativos o encuentros que afecten a personas y fauna silvestre.
-
Disposición social, cultural y política para coexistir con la fauna silvestre.
-
Calidad de los procesos de diálogo, participación, políticas y capacidades.
Dada la complejidad, escala y especificidad contextual del HWC en las 196 Partes del CDB, se buscó desarrollar un enfoque común de monitoreo a través del cual los países puedan informar sobre su situación y progreso relativo. Por ello, la lista propuesta de métricas ofrece un marco común de qué medir, pero permite flexibilidad sobre las herramientas, métodos y encuestas que cada país podría utilizar según su contexto nacional.
Por ejemplo, algunos países ya cuentan con sistemas de recolección de datos enfocados en medir impactos (elemento 1), que pueden utilizar, pero el marco los orienta a identificar vacíos y crear sistemas adicionales para los otros elementos. No se ha identificado ningún país que monitoree sistemáticamente los elementos 2 y 3.
​
Vínculo del indicador con las directrices
El enfoque de otorgar peso sustancial a los aspectos socioeconómicos y políticos del conflicto busca no solo ofrecer una visión más integral y realista del estado del HWC en cada país, sino también incentivar una gestión más holística del conflicto.
Este enfoque también se alinea con los principios fundamentales de las Directrices de la CSE de la UICN sobre el Conflicto y la Coexistencia entre Humanos y Vida Silvestre (UICN, 2023):
1) No causar daño (considerar consecuencias no intencionadas y aplicar el principio de precaución)
​2) Comprender el contexto (cuestionar supuestos y analizar los factores causales)
​3) Trabajar en conjunto (formar equipos con actores y sectores relevantes)
4) Integrar ciencia y política (integración basada en evidencia en la gobernanza)
5) Habilitar vías sostenibles (anticipar y prevenir conflictos emergentes)
El Órgano Subsidiario de Asesoramiento Científico, Técnico y Tecnológico (OSACTT) del CDB también recomienda estas Directrices en su compilación de herramientas y orientaciones existentes que pueden apoyar la implementación del MGBKM (SBSTTA/26/INF/16).
​
Grupo de trabajo
Siguiendo los principios anteriores y un proceso participativo y colaborativo, lanzamos una convocatoria abierta y términos de referencia por seis semanas para formar un grupo de trabajo interdisciplinario e intersectorial. Se recibieron más de 150 postulaciones, y en octubre de 2023 se conformó un grupo inicial de aproximadamente 75 participantes de 45 países. Este grupo incluyó miembros del Grupo de Especialistas, expertos técnicos y académicos en HWC, socios de IGO invitados y representantes de 14 Partes del CDB, incluidos el Reino Unido, Israel, Costa Rica, Italia y Etiopía.
Los miembros del grupo de trabajo se reunieron en una serie de talleres virtuales facilitados por la presidencia y el equipo de políticas del Grupo de Especialistas. Hasta la fecha, se han realizado cuatro talleres entre noviembre de 2023 y abril de 2024. Estos incluyeron ocho iteraciones sobre el concepto, fuentes de datos, organización de métricas, métricas esenciales vs opcionales, y viabilidad de recolección de datos. Algunos participantes también presentaron esfuerzos existentes de recopilación de datos sobre HWC en sus países. También se revisaron otros indicadores y metodologías relacionadas, como METT, SAGE, OECM, y 5DSAF. Después de los talleres, en mayo de 2024, el grupo fue refinado a un núcleo de 35 personas basado en su participación activa continua.
​
La versión actual, en constante refinamiento, contiene 6 secciones:
​
1. Especies y espacios​
2. Personas y medios de vida​
3. Intervenciones​
4. Percepciones y tolerancia​
5. Gobernanza y participación​
6. Políticas y capacidades
Cada sección se desglosa en 6-8 métricas, algunas cuantitativas o categóricas y otras cualitativas, permitiendo respuestas observacionales. El formulario de reporte incluye además el registro de fuentes de datos y nivel de confianza en ellas.
Es importante señalar que la recolección de datos para este indicador no debe ser únicamente responsabilidad del gobierno. Muchas de estas métricas pueden recopilarse mejor mediante colaboraciones o subcontratando el monitoreo a universidades, ONGs con departamentos de investigación, u otros actores en la conservación que realicen monitoreo. Esto distribuye la carga de recursos y fomenta la innovación, mientras se proporciona una estructura común y reconocida internacionalmente para los tipos de datos a recopilar.
Dado que los indicadores componentes son opcionales y las Partes no están obligadas a utilizarlos para informar, se asume que los países donde el HWC es una preocupación prioritaria son más propensos a utilizar este marco. Sin embargo, se espera que el número de países que lo adopten sea alto, ya que muchos han expresado su necesidad de orientación sobre cómo monitorear el HWC para evaluar la efectividad de sus acciones de gestión, incluso antes de tener obligaciones formales de reporte al CDB.
​
Próximos pasos
Como este es un intento novedoso de colaboración para un indicador común sobre HWC de uso internacional, su desarrollo requiere múltiples iteraciones de pensamiento colectivo, redacción y refinamiento. Actualmente (mayo de 2024), los próximos pasos incluyen:
​
-
Presentación del marco conceptual en la SBSTTA 26 del CDB y consultas iniciales con Partes seleccionadas, así como ajustes adicionales con el grupo de trabajo núcleo.​
-
Preparación de un borrador de una lista de herramientas recomendadas para recopilar datos por métrica, con el grupo núcleo y expertos externos cuando sea necesario (por ejemplo, diseño de encuestas sociales, aplicaciones para registrar incidentes, registros de compensación, análisis de gobernanza).​
-
Preparación de un documento informativo para la COP16 del CDB, solicitud de comentarios y presentación del concepto del indicador y borrador del formulario de reporte en la COP16.​
-
Revisión final y planificación de la fase piloto, que se implementará en 2025.
-
​
Actualizaciones adicionales se publicarán aquí y en las secciones de política de nuestro sitio web.
Lista de miembros del Grupo de Trabajo
​
​
​